El fin de un año y el comienzo de otro, significa para muchos la certeza de un ligero o un significante cambio; la navidad es tiempo de reflexión para muchos, sobre las cosas emprendidas en el año que se va y que un nuevo año nos espera no muy distante de nuestros pasos; la navidad es siempre un fructífero reencuentro con amigos o familiares de antaño a las que fácilmente no se las puede olvidar aunque los años sucedan con una fuerza demoledora que solo el tiempo es capaz de juzgar; pero la navidad es tiempo de ver niños con una sonrisa que anima a seguir viviendo por un sueño o un ideal a cumplir, la navidad es tiempo de pensar en los infortunios del corazón pasando por nuestra frágiles mentes, es olvidar las soberbias, las tristezas, los trapos viejos, los infructíferos tiempos de desesperanza, es tiempo de redimir y volver a vivir con mas fuerza que aparte los malos sentimiento pesimistas que suele invadirnos a todos los seres humanos, es tiempo y son días de volver a pensar que hay siempre niños y gentes caminando por calles con trapos viejos instalados en sus cuerpos sufriendo de dolor o pasando noches frígidas envueltas en calles como si fueren inmundos seres raros ajenos a la civilización, es tiempo de pensar que los errores y los infortunios están siempre latentes en un corazón, es siempre buscar un error para aprender de ello, y salir airoso del próximo emprendimiento personal; navidad es tiempo de perdones, es tiempo de abrazos efusivos, es tiempo de desbordar sonrisas por nuestro labios, es tiempo de mostrarnos comprensivos con los errores que talvez nos hayan ofendido; la navidad es tiempo de regalos para niños que con una sonrisa o una lagrima caprichosa, adquieren pequeños juguetes infundidos por ese espíritu juguetón e inquieto, navidad es tiempo de juegos infantiles, la navidad quizá sea exclusiva de los niños.¿Quién no ve niños jugando en calles o plazas jalando un pequeño carrito con una pita? ¿Quién no ve niñas vistiendo muñecas con tanto ahínco imaginando por unos instantes a ser mama? ¿Quién no ve niños con miradas melancólicas esperando un pedazo de alegría saliendo de sus labios? ¿Quién no ve a niños llorando en tiendas de juguetes? ¿Quién no ve la navidad con sus alegrías y sus penas? La navidad es tiempo de niños jugando y cruzando calles y veredas seguidos de sus carros unidos a sus manos juguetonas; la navidad es ver jóvenes recordando tiempos de niñez y mirando melancólicos sus viejos juguetes ahora aglomerados en un cajón, es tocar viejos juguetes y tratar de jugar sonriendo irónicamente o inspirados por un sentimiento de recuerdos que nunca volverán a suceder, la navidad nos recuerda nuestra niñez jugando a no cansarnos por sobre tierras polvorientas, o correr tras curiosos objetos voladores; hay solo en navidades niños entrando en formaciones inmensas, cruzando calles o doblando esquinas, esperando siempre un regalo que sea del agrado; la navidad es tiempo de centrarnos en una sola algarabía en la que todos nos intrometemos, esa es la de ver a gentes esperando un abrazo o un saludo que reanime el alma, navidad es tiempo de fortalecernos y tomar impulso para seguir viviendo en un trance de optimismo, navidad es ver en la víspera, niños lanzando al pequeño espacio petardos encendiéndose, noche de víspera navideña es ver a niños distraídos mirando en el espacio de la ciudad encenderse mil bengalas descuidadas, es ver la noche iluminándose como una especie de una invasión de luz, algarabía, alegría, saltos; navidad es tiempo de éxtasis, éxtasis llegando a invadirnos repentinamente toda nuestra limitada humanidad personal.
La navidad en los niños es un día en donde la mirada inocente se muestra mas confinada en un regalo que en un abrazo; el pequeño universo de un niño en navidad, es el universo de un significativo juguete; pero la navidad no siempre es igual para todos los niños, la sonrisa o el abrazo de la navidad no siempre llega a bordear a todas las gentes, hay niños que esperando un regalo que nunca llega, lloran es esquinas de plazas o en campos alejados a la que los juguetes nunca llegan, hay niños que esperando algún regalo que caiga del cielo o venga por una especie de milagro, esperan sentados sobre pastizales escuchando el leve susurro que los animales producen al comer sus alimentos; hay niños que huyen a ciudades infundidos por ese espíritu justiciero, adentrándose en enormes casas de juguetes para luego salir con una forzada sonrisa, de solo de ver juguetes fantásticos; hay niños que nunca saben o nunca se enteran de navidades, y hay siempre gentes humillando a niños con pretextos sediciosos; hay navidades pobres, para gentes limitadas económicamente, y hay también navidades bien sobrevenidas, para gentes que con un pendiente soberbio pasan buenas vísperas navideñas o buenos días navideños; en un planeta desequilibrado por las enormes distinciones sociales, siempre hay navidades en sus diferentes presentaciones; pero la navidad no solamente esta en los juguetes de los niños, y no solamente esta en un abrazo efusivo, la navidad también llega con sus armazones de niños naciendo estáticos, solo imaginariamente, hay niños de bellas esculturas naciendo entre sonidos que agobian el alma, hay andamios de niños bellamente labrados, hay luces fulgurantes chispeando en medio de minimizados animales, y hay un niño naciendo rodeado de personajes labrados con tierra y yeso, hay una madre abrazando a un niño en medio de la noche, hay miradas estáticas sobre un armazón de creencias milenarias, hay en media noche panteones partiéndose con sus pasas envueltas en masas amarillentas, hay en noche buena, tazas repletas de chocolate, hay labios hablando de una esperanza, y la navidad llegando con sus ánimos que levantan la esperanza.
La navidad y sus niños jugando a no dormir, y la navidad siempre atravesando sobre un recuerdo, la navidad es la que siempre nos lleva a esa reflexión que el infortunio, el desanimo o la desesperanza esta a la vuelta de la esquina, esperándonos con sus látigos que suenan y con sus ecos llegando a oídos extraños; la navidad nos trae ese pensamiento de renovación, nos muestra esa estrella de Belén la cual nos da la dirección para enrumbarnos hacia un destino bien encaminado, la navidad imprescindiblemente es tiempo de la combinación del amor del universo, en donde todos los seres humanos por un día o una noche podemos sentir el inmenso amor de la divinidad, la navidad es tiempo de ver la armonía universal cayendo sobre nuestros sentimientos, la navidad es tiempo de irnos a acostar en paz pensando que todo esta bien, pensando que una esperanza llega con sus alegrías; la navidad es descubrir en una mirada infantil ese amor universal recorrer por sus ojos; y lo que siempre se ha dicho, navidad es compartir aunque un pedazo de pan no haya sobre la mesa o una taza de chocolate no alcance para todos, navidad es convertir un pan en miles de panes y repartirlo entre niños que se pierden en su tristeza al ver a otros niños jugar con juguetes maniobrados a distancia, la navidad nos trae y nos hace ver con ojos agigantados que el amor siempre esta ahí, y la navidad es la que nos hace entender que el amor es el principio y el fin del universo.
Seguirán habiendo navidades acompañando de nuevos niños, y seguirán habiendo sonrisas y lagrimas en venideras navidades, seguirán los corazones humanos siendo visitados por navidades que mas allá de un nacimiento, es la renovación del amor, y en cada navidad se verán gentes con deseos frustrados; seguirán viniendo navidades a afirmarnos que el amor esta siempre ahí a nuestra disposición, que el arma de la paz esta siempre ahí para utilizarla con el razonamiento pacifista y con el sentimiento amoroso; la navidad siempre será un momento grato entre juego de niños y conversaciones a carcajadas recordando momentos agraciados o momentos plenos vividos; la navidades llegaran y se irán dejando una sonrisa; la navidad entre niños será siempre un encuentro con el espacio divino de la inocencia transcurriendo por impávidos juguetes manoseados; y nosotros que fuimos niños ¿acaso no recordamos nuestra navidades entre juegos? ¿acaso no es la navidad un momento grato que nos sucede como pocas cosas en la vida?
La navidad esta vestida de un niño; y su alegría esta en la alegría de un niño, la navidad es un niño con su juguete, la navidad es Jesús jugando con los niños del mundo después de haber nacido, la navidad es una reflexión en donde son muchas las cosas que hemos podido lograr en el año que se nos va, pero a veces ese orgullo de estar siempre en la verdad es la que nos lleva a un desventura de la que muchas veces salimos lastimados o con brazos rotos imaginariamente; por eso la navidad es momento de renovación, es momento a detenernos por un momento en nuestra loca carrera, para mirar el camino agreste que puede estar esperándonos y tomar el camino mas perceptible; navidad es tiempo de niños jugando con su inocencia y navidad es tiempo de renovación y reflexión।
Por: Jesús Henrry Mojo López
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